Nací en la mejor tierra del mundo, en la Terreta. Desde siempre he sido una persona curiosa, de las que necesitan entender cómo funcionan las cosas y, sobre todo, cómo hacerlas mejor. Estudié Arquitectura Técnica y ejercí durante cuatro años, pero la crisis inmobiliaria me llevó a replantearme mi futuro. Fue entonces cuando decidí qué quería hacer «de mayor».

Compartir mi vida con un ingeniero informático despertó en mí la curiosidad por las nuevas tecnologías. Empecé explorando por mi cuenta, experimentando, aprendiendo sobre diseño y desarrollo web. Lo que comenzó como un reto personal, pronto se convirtió en mi vocación. Descubrí que el diseño web me permitía combinar creatividad y lógica, diseño y estrategia.

Desde entonces, llevo más de siete años ayudando a emprendedores y empresas a construir su presencia digital. Me involucro en cada proyecto porque sé lo importante que es para quien confía en mí. Y si hay un reto en el camino, lo afronto con determinación: si existe una solución, la encontraré.